Dando testimonio de dignidad, de bronca contra la injusticia, y de firmeza ética, nos encontramos hoy en el Reloj de María Grande por el lapso de una hora, aproximadamente. Dimos muestras, una vez más, los trabajadores de la educación de María Grande y de la región, de compromiso en la lucha por el respeto a los derechos humanos y sociales. Estuvieron presentes compañeras y compañeros docentes de María Grande, de Tabossi, de El Pingo y de Cerrito, jubilados, vecinos que se acercaron y militantes de distintos gremios pertenecientes a la CTA.
En una asamblea abierta, horizontal y democrática, reafirmamos nuestra indignación ante el asesinato de Mariano Ferreyra y el ataque a un grupo de compañeras y compañeros en BsAs, y nos sumamos con firmeza a la exigencia de todas las organizaciones sociales de Argentina, de juicio y castigo a los autores intelectuales y materiales de este crimen. Y claramente, dijimos todos que la adhesión al paro nacional de la CTA que realizamos no es sólo por el reclamo de justicia, si no que también para defender el derecho a tener derechos, y el derecho a reclamar y a luchar, frente a la impunidad y los ataques de los amigos y socios del poder.
El paro nacional, la acción directa y las movilizaciones en todo el territorio argentino, son un hecho histórico: los trabajadores y la militancia popular le dice fuertemente “hasta aquí hemos llegado” al doble discurso del gobierno, a la complicidad de las instituciones del Estado con la impunidad, y a la burocracia sindical empresaria y mafiosa.
Los trabajadores rechazamos además fuertemente el lamentable discurso ideológico hegemónico que plantea la muerte como parte de una “violencia sindical” o de una pelea entre barras. Es infame plantear que Mariano murió en una “pelea sindical”, cuando todos sabemos que su asesinato se debió a una emboscada y un ataque político, empresarial y mafioso contra la lucha de los trabajadores.
Las elites del poder y la propia burocracia cegetista nacional buscan deslegitimar, reprimir y amedrentar a toda la militancia sindical auténtica y a toda la militancia popular. Pero la organización y la lucha no se asesinarán nunca, porque mientras haya necesidades habrá bronca, y mientras haya bronca, habrá luchas por la justicia y por los derechos de todos.
Cuando iba a comenzar la asamblea, se acercó personal policial de María Grande a solicitarle información sobre la misma al Sec. Gral. de la filial local de AGMER, diciéndole que la información era “solicitada desde la provincia”.
Se respondió a la solicitud, y más adelante, en la Asamblea se lamentó esta actitud del gobierno provincial, que por primera vez pidió información sobre una asamblea local.
Se lamentó también que los gobiernos actuales se preocupan por controlar policialmente las asambleas de los trabajadores en lucha y no a los patoteros y asesinos de obreros, estudiantes y desocupados.
Para finalizar, se rechazó por antidemocráticas, inhumanas e inmorales las declaraciones del Ministro Adan Bahl, quién salió públicamente a minimizar el asesinato y a desconocer, una vez más irresponsable e inútilmente, el paro nacional, el reclamo ético y el derecho a huelga de los trabajadores frente a tanta injusticia.
Esta actitud, y la varios que piensan como el gobierno y que atacan los reclamos por justicia, por derechos y por una vida mejor para todos, nos hizo recordar en la asamblea a aquel infame “por algo será” que tantos expresaron en la última dictadura militar, y que terminó siendo cómplice de los genocidas que destruyeron a la sociedad argentina. La asamblea rechazó categóricamente el surgimiento del “por algo será” en cualquier forma o en cualquier variante actual.
Mauricio Castaldo
Sec.Gral AGMER María Grande y
Sec.DDHH CTA Paraná
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