“El profundo proceso de transformaciones políticas, económicas, sociales y culturales que nuestra patria necesita para eliminar la dependencia, concretar una sociedad justa y el pleno ejercicio de la democracia, requiere que la educación propenda al desarrollo de la conciencia y actitudes científicas y críticas de los educandos frente a la realidad y la sociedad, a fin de que impulsen ese proceso, realizándose así social y personalmente. El docente, trabajador de la educación, está trascendiendo la condición de transmisor de conocimientos, para actuar permanentemente como un factor importante del avance social que posibilitará la auténtica liberación del hombre, la patria y los pueblos.”
CTERA, Declaración de principios de Huerta Grande, Agosto de 1973
Desde AGMER queremos expresar públicamente nuestro rechazo a la injerencia de las empresas multinacionales como Telefónica y el Grupo Santillana en la educación entrerriana, injerencia que se refleja en la orientación del Programa LEO, La Escuela Orientadora , acordado por el Consejo General de Educación de E.Ríos y el gobierno nacional con el capital concentrado transnacional.
No creemos que el empresariado extranjero o la lógica del mercado sea la más recomendable o justa para orientar nuestra escuela secundaria o “para acompañar a los alumnos en su actividad futura”, como así tampoco para conducir el uso de las nuevas tecnologías, como dice la presentación del CGE. Tanto o más que los sectores dominantes y que la ideología hegemónica del mercado, nuestras comunidades educativas tienen derecho a analizar u orientizarse con lo mejor de la historia económica, social y cultural entrerriana, como de los modos de producción y de trabajo que plantean los sectores de nuestra tierra vinculados al minifundismo, al cooperativismo y la economía social, a las pequeñas empresas familiares, a las artesanías y la autogestión, y/o al ambientalismo y la producción regional sustentable, entre otros.
Para nosotros la educación entrerriana y la vida social deben estar orientados con los criterios de una soberanía pedagógica, política, social, económica, alimentaria, ambiental y cultural, no con la lógica depredadora, precarizadora y fracasada del mercado y de los '90.
En Nuestra América se vienen desarrollando ejemplos y experiencias de debate y lucha contra la colonización y la neocolonización pedagógica, ideológica y cultural. Tal el caso de la hermana República de Bolivia, dónde hace un tiempo los manuales europeos Santillana fueron dejados de lado por la política educativa para pasar a trabajar con los propios textos producidos por la propia investigación de los docentes y por los movimientos sociales.
Exigimos al gobierno cambiar el contenido y la orientación del programa LEO y convocamos a todos los compañeros docentes a superar, con el debate profundo y con el desarrollo de una crítica creadora, las limitaciones, estrecheces y trampas establecidas por los sectores del poder hegemónico.
Escuela Pública ¡Siempre!
Secretaría General
AGMER
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